La producción de la industria alimentaria aumentó un 2,2% en 2024
Autor: Valeria Muñoz Espinoza - Equipo Industria Alimentaria

El sector de la industria alimentaria cerró el año 2024 con un crecimiento del 2,2% en su producción, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística. Este incremento refleja una recuperación progresiva del sector tras varios años marcados por dificultades económicas, crisis de suministros y fluctuaciones en los costos de producción. La mejora en la eficiencia operativa de las empresas, la estabilización de los precios de las materias primas y una mayor demanda tanto en mercados nacionales como internacionales han sido factores determinantes en este crecimiento sostenido.
Este desempeño positivo se alinea con las proyecciones de Crédito y Caución, que anticipaban un aumento del 2,8% en la producción mundial de alimentos y bebidas para 2024, seguido de un crecimiento estimado del 3,1% en 2025. Las perspectivas del sector se mantienen optimistas gracias a la recuperación de la actividad industrial y al fortalecimiento de la exportación de productos agroalimentarios. Además, la digitalización y la modernización de los procesos productivos han jugado un papel clave en la optimización de la cadena de suministro, permitiendo a las empresas adaptarse con mayor rapidez a los cambios en la demanda.
En términos regionales, la producción de alimentos en España experimentó un crecimiento del 1,9% interanual durante la primera mitad de 2024. Este repunte marca un punto de inflexión luego de varios años de cifras negativas desde 2021, en los que el sector enfrentó desafíos como el aumento de los costos energéticos, la escasez de ciertos insumos y la incertidumbre económica global. La moderación en los costos de producción, junto con políticas gubernamentales orientadas a la sostenibilidad y la eficiencia energética, han permitido que las empresas del sector puedan mejorar su competitividad y ampliar su capacidad de producción.
El valor total de la producción agroalimentaria alcanzó una cifra récord de 68.430 millones de euros en 2024, lo que evidencia una reactivación sostenida en el mercado. Este crecimiento ha sido impulsado en gran medida por la exportación de productos de alto valor añadido, así como por la diversificación de la oferta de alimentos en respuesta a las nuevas tendencias de consumo. La creciente demanda de productos saludables, ecológicos y con certificaciones de calidad ha obligado a los productores a innovar y mejorar sus procesos para satisfacer a un consumidor cada vez más exigente.
Por otro lado, la fabricación de bebidas también ha mostrado signos de recuperación, registrando un incremento del 2,6% en su facturación hasta julio de 2024, con un aumento del 3,6% en comparación con el mismo mes del año anterior. Este crecimiento ha sido impulsado por una mayor demanda en el mercado interno, así como por la expansión de marcas locales en mercados internacionales. La innovación en la formulación de bebidas, la introducción de productos con menos azúcar y opciones más saludables han permitido captar nuevos segmentos de consumidores y consolidar la recuperación del sector.
A nivel global, las proyecciones para 2025 y 2026 son alentadoras, con estimaciones de un crecimiento superior al 3% en la producción y ventas del sector alimentario. Esta expansión estará respaldada por la modernización de la industria, el uso de tecnologías más eficientes y la integración de prácticas sostenibles en los procesos productivos. Con una demanda en constante evolución y consumidores cada vez más interesados en la calidad y el origen de los productos que consumen, la industria alimentaria enfrenta el reto de continuar innovando y optimizando sus recursos para mantener su crecimiento y competitividad en un mercado globalizado.
Fuente: Interempresas